Antes de crear la editorial, ¿cuáles eran vuestros objetivos, vuestros postulados?
Creamos Dalpine con la intención de ofrecer una plataforma de difusión y venta de libros de fotografía autoeditados y de sellos pequeños, un sitio especializado accesible a todo el mundo.
¿Qué os animó a fundar un sello así? ¿Visteis un nicho, os percatasteis de que había muchos trabajos interesantes sin editor, era una idea largamente deseada…?
Vimos que los fotógrafos tenían dificultades tanto para vender sus libros como para producirlos. La idea de crear la editorial estuvo en el origen del proyecto, pero nos hacía falta experiencia y en fotografía los trabajos se desarrollan con mucho tiempo. Con el trabajo de estos años se nos ha presentado la ocasión de producir libros nosotros mismos.
¿Cuántas personas formáis el equipo de Dalpine?
Dalpine lo formamos Jos y Sonia.
¿Vuestra formación también es fotográfica/artística?
Fuimos, y seguimos siéndolo, estudiantes de fotografía, y profesionalmente nos dedicamos a cosas que hemos integrado en este proyecto, la edición y la consultoría informática.
Acabáis de volver de un importante festival en Arlés (Francia), ¿viajáis mucho para buscar nuevas propuestas, futuras colaboraciones, otros fotógrafos…?
Sí, procuramos viajar a los principales encuentros o festivales de fotografía. Es la forma de estar en contacto directo con lo que se está haciendo en otras partes, de que se den intercambios y de promocionar nuestros libros.
En vuestro caso, la independencia implica/aporta/genera…
Nos da la libertad de decidir cuándo, cómo y qué, y de tener una visión realista sobre el trabajo que hacemos.
¿Cuáles son vuestros criterios de selección para editar un nuevo libro?
Básicamente los mismos que aplicamos a la hora de seleccionar libros para la venta. Valoramos que sea un trabajo que mantenga interés en el tiempo, que esté pensado para funcionar de forma autónoma como libro, que no sea un mero soporte para la difusión de fotografías y cuyo diseño se adapte al contenido y lo realce.
Para este año… ¿tenéis cerrados nuevos títulos? ¿Podéis adelantarnos algo?
De momento estamos centrados en la distribución de los dos nuevos títulos, para el otoño quizá haya novedades.
¿Hubo alguna editorial cuyo trabajo o catálogo os sirviera de modelo o que os guste especialmente?
Photovision en España, por ejemplo, tuvo un papel fundamental publicando títulos como Infinito de David Jiménez, Vanitas de Cristóbal Hara o Fauna de Joan Fontcuberta. A nivel internacional, nos gusta el modelo que ha creado MACK, creemos que ha redefinido el panorama de los libros independientes.
¿Cómo es íntimamente la edición de un libro vuestro? ¿Editáis conjuntamente la serie que se convierte en libro? ¿Cómo es el diálogo con el fotógrafo en cuanto a concepción, diseño…?
No intervenimos en el proceso creativo del libro. En estos trabajos, los fotógrafos llevan años fotografiando y dando forma al libro. Sí que vemos las maquetas, ofrecemos nuestra opinión acerca de la edición, el diseño o de la elección de materiales y formato, pero la decisión última la toma el autor.
Desde vuestro punto de vista, ¿cómo veis el panorama fotográfico actual más joven?
Muy activo, muy curioso y con ganas de experimentar y avanzar. Hay más convocatorias, debates, colectivos y personas implicados en fotografía que nunca.
¿La autoedición es una elección creciente?
El libro es un formato eficaz para la difusión de trabajos. Al igual que en literatura, ahora se dan las condiciones para que un autor pueda hacer un libro, promocionarlo y venderlo de forma autónoma y muchos fotógrafos optan por ello.
Aparte de online, ¿en qué librerías se pueden comprar vuestros libros? Dadnos tres/cuatro sitios en Madrid.
Se pueden encontrar en La Central del Reina Sofía, en Ivorypress o en Swinton & Grant.
¿Cuál es el libro fotográfico que más veces habéis hojeado de los que tenéis en vuestra biblioteca personal?
Probablemente Paloma al aire, de Ricardo Cases. Es un libro increíblemente bien realizado que trata sobre la colombofilia deportiva en Levante, algo desconocido para nosotros antes de descubrir este libro.
Una exposición que no podemos perdernos en esta edición de PHotoEspaña. ¿Por qué?
Fotografía 2.0 ofrece una visión de las diferentes prácticas fotográficas relacionadas con las innovaciones tecnológicas por parte de un numeroso grupo de jóvenes fotógrafos españoles. Pone de relieve la transformación de las prácticas fotográficas y las preocupaciones de los fotógrafos en tanto que críticos de la nueva situación de producción masiva de imágenes.
Lleváis ya cuatro años… ¿Qué balance hacéis de este tiempo tanto a nivel mediático como personal?
El balance es muy positivo, creo que hemos contribuido a la difusión del trabajo de muchos fotógrafos. Personalmente, es muy importante poder seguir trabajando en algo que nos apasiona, ¿se puede pedir más?
Tenéis una web bilingüe. ¿Vendéis más fuera que en España?
Sí, pero por razones lógicas. Los libros de fotografía interesan a unos pocos en cada país, si sumas los lectores del resto del mundo sobrepasan en número a los españoles.
¿Por qué Dalpine?
Estuvimos jugando con diversos nombres hasta que dimos con uno que nos encantaba y nos enamoramos de él. Además es fácilmente pronunciable en muchos idiomas, un comodín.
Entre todos los libros que vendéis… ¿Por cuál tenéis especial predilección?
Por los que hemos publicado nosotros, los libros de Fiesta Ediciones, el de Antonio Xoubanova, los de sellos españoles pequeños, los autopublicados. Nos gusta todo, sobre todo cuando sabes la cantidad de trabajo que hay detrás de cada uno de ellos.
Además de la fotografía, sois unos apasionados de…
La literatura, la música, las lenguas, los gráficos de datos y la cocina.
Comentarios:
Añadir comentarioLarga vida a la fotografía, y a Dalpine!