Madriz / Ideas y Entrevistas 17 de February 2017 por Diego Parrado Tweet · Share

La primera vez de David Bowie en Madrid

En marzo de 1987, David Bowie visitaba Madrid, junto con Peter Frampton, para dar su primer concierto en España. Fue entonces cuando los dos amigos salieron a recorrer las calles de la capital, en busca de un bar. Seguimos sus pasos por el Madrid de finales de los 80.

Antes de su concierto en el Vicente Calderón, el primer concierto que el cantante dio en España, Bowie cantó en Madrid el 23 de marzo de 1987. Ocurrió en el “Plató Discoteca Jácara”, una sala situada en la calle Príncipe de Vergara por la que también pasaron Mecano o Radio Futura y que echó el cierre cuatro años después. Bowie había venido a Madrid a presentar su gira “Glass Spider”, aquella del escenario convertido en una araña gigante, y fue ese día de marzo, y no en junio, cuando la MTV le sacó a dar su mítico paseo por el centro de Madrid que se hizo viral hace unas semanas. De ahí que los madrileños que aparecen en el video no vayan en mangas de camisa, sino que vistan abrigo y chaqueta.

En la sala “Jácara”, Bowie dio una breve rueda de prensa, que abrió y cerró con un par de canciones de “Never let me down”, su nuevo disco. En el el escenario apareció con Carlos Alomar, su guitarrista, y el resto de sus músicos. Más sorprendente fue la presencia de su amigo Peter Frampton, al que conoció de niño en Brixton. Juntos interpretaron “Day in, day out”, el single del disco: ésta fue, por tanto, la primera canción que David Bowie tocó en España.

https://youtu.be/zl9BLmwFi0U

Después Bowie y Frampton bajaron al centro a tomar unas cañas. El vídeo empieza en ese momento, con los dos amigos en la plaza Santa Ana (todavía no le habían quitado su parque), presumiblemente después de tomar unas cuantas en la cervecería alemana, porque luego, admirando los famosos azulejos del tablao Villa Rosa, Bowie dice que fueron pintados por El Greco, Goya y Rafael: es el tablao en el que Almodovar rodó años más tarde la actuación de Miguel Bosé como Vicky del Páramo en “Tacones Lejanos”.

Durante su paseo, David Bowie se topó con al menos otros dos elementos importantes en la historia de la ciudad. Tras separarse del Villa Rosa, Frampton y él doblan la esquina del tablao y cruzan el callejón que Valle-Inclán inmortalizó en “Luces de Bohemia”, el Callejón del Gato. “Los héroes clásicos han ido a pasearse en el callejón del Gato”, dijo Max Estrella, y allí, en el cristal de un bar, porque los famosos espejos que aparecen en la novela desaparecieron hace mucho tiempo, aparece reflejado Bowie en un momento del vídeo.

Luego los dos amigos atraviesan la plaza Jacinto Benavente, y en un plano del vídeo en el que caminan por la calle de la Bolsa, Bowie coincide con uno de los míticos grafitis de Muelle. Muelle fue el pionero del grafiti en España, y aunque ese en concreto ha desaparecido, hace poco se ha restaurado el que hay en la calle Montera.

Por fin Bowie y Frampton encuentran una cerveza en una de las terrazas de la Plaza Mayor y el video termina. Volvieron en junio para el concierto del día 4 en el estadio Vicente Calderón, que pronto se esfumará como Jácara, el Villa Rosa, los espejos del callejón del Gato y el grafiti de Muelle. No hubo llenazo, y las críticas no fueron las mejores, pero, ¿qué importa eso? Cuando el año pasado se murió Bowie, muchos madrileños pidieron que le pusieran una plaza en Malasaña. No le hace falta; le tendremos toda la vida en la punta de la lengua tarareando “Heroes”.